lunes, 9 de diciembre de 2013

Reparación llantanzo en llanta de aleación BMW F650GS

En nuestra última ruta trail que hicimos con las motos, una de nuestras pequeñas sufrió una herida. Para ser precisos, hace ya un par de años aproximadamente sufrió un llantazo en una pista de tierra en la provincia de Guadalajara. No era una pista complicada, ni con trialera ni nada parecido, todo lo contrario. Precisamente por la amplitud y sencillez de la pista íbamos ligeros y al encontrarnos de repente con un surco, la suspensión delantera hizo tope, llevándose la llanta el golpe de forma que el nervio de la misma se dobló. Vimos que la rueda no perdía presión así que no le dimos más importancia. No obstante para asegurarnos aún más la golpeamos un buen rato con una maza y un taco de madera. Dejamos el nervio un poco más apañado y sin problemas. Simplemente cuando revisas y llenas de presión tus ruedas, pues en este caso, la delantera había perdido algo más que la trasera, pero como decimos, nada realmente importante.


Estado de la llanta tras el golpe

Como comentábamos al principio en nuestra última ruta por la provincia de Toledo, al parar un rato bajando por una trialera, uno de nosotros se dio cuenta que la rueda delantera estaba bastante deshinchada y como ya conocíamos el llantazo de antaño, todos supusimos que se habría abierto más y por ahí es donde perdía aire. Estábamos aún a unos cuantos kilómetros de la carretera y había que bajar una trialera para llegar a ella, así que para no estropear más ni la llanta ni el neumático, bajamos con mucho cuidado con la rueda deshinchada hasta ver un llano y poder usar un spray antipinchazos que la verdad hizo muy bien el apaño. Eso sí la ruta off se nos acabó por ese día. Decidimos ir ya por carretera a Escalona y celebrar la hazaña con unas cervezas.

Tras un tiempo de búsqueda, encontramos Talleres Calvet, un pequeño taller en Madrid donde me dijeron que quedaría perfecta por unos 65 €, nos pareció aceptable. El único impedimento era que había que llevar la llanta desmontada pero nos dijeron que cerca había un taller que conocían ellos personalmente y que la desmontaban, la traían a reparar y se la volverían a llevar para volverla a montar por un precio muy moderado, así que para que no fuese todo más complicado decidimos hacerlo así. El problema es que después de dejar la moto, nos llamaron del taller de la llanta para decirnos que estaba ya arreglada y había quedado como nueva, pero que habían encontrado una fisura muy pequeña cerca del nervio doblado en la parte de uno de los brazos de la llanta, que podría perder aire por ahí pero que no estaba seguro porque él no podía comprobarlo. Como la soldadura de esa fisura serían otros treinta y pico euros decidimos que de momento la llevaran a montar y luego si perdía pues que habría que soldarla. Efectivamente así fue, se la llevó el del taller para montar el nuevo neumático y efectivamente seguía perdiendo aire. Así que todo estaba claro ya, el nervio de la llanta doblado hace un par de años no empeoró, por ahí no perdía el aire, si no por la nueva fisura, eso sí, cerca del nervio. Que el nervio hubiese tenido algo que ver en la nueva visura, eso no lo sabremos nunca. El caso es que hubo que volver a desmontar el neumático nuevo y llevar la llanta a soldar.

El neumático antiguo nos lo trajimos porque aún le quedarán unos 4000 - 5000 km pero al haber usado el spray, por lo visto hay que limpiarlo muy bien y suele quedar parte del adhesivo y eso hace que pierda aire, así que nos recomendaron que compráramos una cámara para volver a montarlo después del invierno para aprovechar lo que le queda de vida.

Gajes del oficio, a día de hoy la llanta ha quedado perfectamente. ¡¡Hasta la próxima!!

2 comentarios:

  1. Si volvéis a tener problemas,llevádsela a Roberto en El Álamo.Las monta y desmonta,comprueba si hay fugas...y es barato y de confianza.Os dejo el tfno. 918120491.Por propia experiencia.

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